El Consejo Nacional de Empresas de Peluquería y Estética de España considera que para la supervivencia de buena parte de las empresas del sector de la imagen personal resulta imprescindible la prolongación del tiempo de duración de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).

Pese a no ser la mejor opción para solventar la situación crítica por la que atraviesa este sector (otras medidas están siendo objeto de reivindicación por otras vías), los ERTE son una medida que no puede extinguirse por el simple hecho de que los confinamientos hayan dejado de ser obligatorios.

El decaimiento del consumo no se ha superado, ni mucho menos; con la circunstancia agravante de que ahora nos hallamos en una situación de confinamiento recomendado por todas las autoridades, pero no obligatorio, con lo cual no se genera en principio el derecho a una compensación ya que, en el plano puramente teórico, las empresas pueden funcionar con normalidad.

Esa normalidad no es tal, dado que el temor social al contagio y los continuos mensajes de alarma (sin duda justificados) disuaden a la clientela de acudir a unos locales en los que, pese a las abundantísimas medidas de seguridad, resulta inevitable no solo la proximidad, sino incluso el contacto físico con el profesional.

Es innecesario, por obvio, incidir en la imposibilidad del teletrabajo en los servicios de peluquería y estética, con lo cual el único personal productivo es el que está presencialmente en el salón atendiendo clientes.

Por todo ello, y mientras no puedan implementarse otras medidas de apoyo directo a las empresas para ayudarlas a no destruir empleo, resulta imprescindible prolongar esa medida temporal que es el ERTE durante tanto tiempo como se mantenga la actual situación de limitación de la actividad económica y la movilidad, obligada en algunos lugares y recomendada en todos.

En caso contrario, cuando al llegar el 30 de septiembre las empresas se encuentren ante la realidad de tener que asumir la totalidad de sus costes laborales con una facturación muy inferior a la habitual, los despidos y los cierres de empresas serán inevitables y numerosos. Los cálculos efectuados por CONEPE a través de las informaciones facilitadas por sus asociados indican que pueden perderse en torno a un 30 % de los puestos de trabajo y cerrar de aquí a final de año aproximadamente un 15 % de los salones.

En consecuencia, a fin de salvar empresas y puestos de trabajo, desde CONEPE instamos a patronal, sindicatos y gobierno de la Nación a acordar la prórroga de los ERTE mientras permanezca la actual situación.

En Madrid, a 25 de septiembre de 2020.

Luis Herrera-Portugal Hurtado

Presidente